Introducción
El pase y la recepción son las acciones más frecuentes en el fútbol y su dominio determina la fluidez del juego. Enseñar a los niños a pasar con precisión y recibir el balón correctamente sienta las bases de la colaboración en equipo. En este artículo encontrarás ejercicios progresivos para ganar confianza y sincronizar movimientos con tus compañeros.
1. Pase en pared con dos toques (Two-Touch Wall Pass)
El jugador realiza un pase contra la pared, controla con un toque y devuelve con otro. La doble recepción obliga a mejorar la precisión en el primer toque y la fuerza del segundo.
2. Rondo reducido (Mini Rondo)
Con cinco jugadores: cuatro atacantes y un “ladrón” en el centro. Los atacantes mantienen el balón con pases al primer toque, mientras el defensor intenta interceptar. Espacio de 6×6 metros. Fomenta la velocidad de pase y la visión periférica.
3. Pase largo dirigido (Directed Long Pass)
Dos parejas separadas por 15 metros. Se marcan pequeños objetivos (aros o conos). Los niños practican pases largos con empeine interno buscando caer el balón dentro del aro. Aumenta gradualmente la distancia y la altura del balón.
4. ‘Pase al espacio’ y desmarque (Pass & Move)
En líneas paralelas, jugador A pasa a B, quien devuelve al espacio detrás de A. A corre al espacio para recibir de nuevo. Trabaja el timing entre pase y desmarque.
5. Triángulos dinámicos (Dynamic Triangle)
Tres conos forman un triángulo de 5 metros de lado. Tres niños rotan posiciones tras cada pase: A a B, B a C, C a A. Control y pase de un toque.
Consejos metodológicos
- Ajusta distancia y número de toques según edad.
- Refuerza la comunicación verbal: “¡mía!”, “¡tuyo!”
- Premia la precisión antes que la velocidad.
Conclusión
Implementando estos ejercicios en cada sesión, los jugadores adquieren automatismos de pase y recepción, claves para el éxito de cualquier equipo. Con tiempo y práctica, el juego colectivo será más armónico y eficaz.